Vodafone atraviesa un momento complicado en España.
En la presentación de resultados trimestrales del pasado febrero (correspondiente al último trimestre de 2022), la teleco británica facturó un 9,8% menos que en el mismo trimestre del año anterior. En ese momento, la empresa lo achacó a la guerra de precios que existía en el mercado y a la subida de tarifas que había efectuado la propia Vodafone, pero la situación no ha ido a mejor.
La dimisión de Colman Deegan, CEO de Vodafone España, a comienzos de año desencadenó una crisis en lo más alto de su cúpula directiva que parecía haberse solucionado 2 meses más tarde, con la llegada de un nuevo consejero delegado: Mário Vaz, hasta ese momento CEO de Vodafone Portugal.
Vaz tomó posesión el pasado 1 de abril, sin embargo, su llegada no solventó los problemas que la compañía lleva atravesando un tiempo y en este momento Vodafone podría estar valorando la venta de su negocio en España.
Sprint final por los ‘remedies’ de la fusión de MásMóvil y Orange: estos son los operadores mejor posicionados y sus estrategias
Así lo ha adelantado Expansión, que ha citado a varias fuentes conocedoras de la situación que han adelantado que la teleco estaría trabajando junto a asesores externos, como Morgan Stanley o Garrigues, con la intención de valorar las distintas opciones de las que dispone su filial en España.
Según este medio de comunicación, la matriz británica puso a Vodafone España bajo “revisión estratégica, teniendo en cuenta todas las opciones potenciales”, después de una presentación de resultados en el primer trimestre del año que no cumplió con las expectativas previstas.
Además, la filial española fue rebajada de rango a principios de año, dejando de ser una unidad independiente —como Alemania, Reino Unido e Italia— y pasando a ser enmarcada dentro del clúster de Europa. Al parecer, Vodafone ya se habría puesto en contacto con algunos fondos interesados en la compra del negocio en España, como Apollo Global Management o Apax Partners.
Según Expansión, la filial podría valer en torno a 3.900 millones de euros.